Aunque no es el tipo de pesca que habitualmente tratamos en este foro, dado que estoy extremadamente agradecido por la oportunidad que me brindó uno de los más carismáticos patrones de Cudillero, debo redactar esta entrada como muestra de cariño por su invitación.
El curricán de altura en el Cantábrico, a nivel de pesca deportiva, requiere de otro tipo de embarcación, preparación de la salida, material y tiempo muy distinto del curricán costero.
La previsión del tiempo y el estado de la Mar eran inmejorables, datos necesarios antes de embarcarnos en una jornada que nos llevaría más allá de las 40 millas de la costa. La idea que nos rondaba la cabeza (por la que apenas pude conciliar el sueño la noche anterior) era dar con alguno de los bancos de bonito del cantábrico (thunnus alalunga). Este tipo de pesca obliga a recorrer muchas millas, las 25-30 primeras a 20 nudos para alejarnos de la costa, a partir de aquí a unos 7 nudos.
Con ayuda de los mástiles laterales, colocamos 7 señuelos en el agua, 5 pulpos de distintos tipos (escalonados en su distancia) y dos rapalas grandes con tonos de caballa y más cerca de la popa.
Los datos que nos llegaban por la radio de las embarcaciones que curricaneaban por la zona eran muy poco optimistas, ni rastro de los alalunga. A mediodía recibimos noticias de los escurridizos atunes, estaban entrando a 56 millas de la costa, nosotros estábamos a 34 en ese momento. Demasiado lejos para intentar llegar. Una sombra de desánimo rondó por nuestras mentes.
Enseguida, desde embarcaciones más cercanas, comenzamos a oir noticias de fuertes picadas. No eran los bonitos del cantábrico, eran "bonitas". En esta zona de asturias se denomina con este apodo a la especie "thunnus obessus", un túnido con un peso medio de 60 kg con grandes ejemplares de casi dos metros que superan los 100 kg de peso. Estas noticias nos dejaron en un nuevo estado de excitación, tal vez no disfrutaríamos de una extenuante pescata de bonitos del norte de los de 10 kg pero a cambio podríamos optar a capturar uno de los de "la otra liga".
Llegó la hora de comer con una picada que no afirmamos bien y se perdió en la primera arrancada. De nuevo el desánimo nos invadió.
Comimos compartiendo experiencias del pasado, ese tipo de jornadas en las que en el último momento se cambia un día gris en uno de los más maravillosos que recuerdes y nada más terminar la comida, sentimos el dulce sonido del carrete corriendo...... ¡¡¡y no paraba!!!!
La lucha se alargó más de 50 minutos, hasta 16 veces lo acercamos a la popa (en 5 de ellas lo tuvimos a menos de 10 metros bajo nuestros pies) y la sombra que apareció en el agua nos estremeció: ¡era una "bonita"!
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| Atun Cantabrico (Big Game) |
Finalmente nos hicimos con la pieza, tuvimos que coordinarnos perfectamente para poder embarcarla, el trabajo fue duro, con momentos de alta tensión pero el buen hacer de nuestro experto marinero determinó el éxito del lance.
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| Atún Cantábrico |
Os adjunto fotos de la pieza, que acabó en un sabroso marmitaco para 40 personas (y sobró la mitad).
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| Atún (trabajo en equipo) |
